Salud
Activismo ciudadano por la libertad de Venezuela
Activismo ciudadano por la libertad de Venezuela
Creado por: Eruby Villamarín Páez
Quizá el área de crisis más dolorosa, después de la catástrofe alimentaria que se sufre en Venezuela, es la catástrofe de la salud. Médicos, enfermeras y demás personal, con salarios de hambre, sin medicinas ni insumos, sin dotación y ahora, sin protección para prevenir el contagio de COVID-19, que agrava la situación hospitalaria en el país, en niveles insoportables. Ya han fallecido más de 70 servidores de la salud, entre ellos, 52 médicos y todos los días hay más fallecimientos porque los hospitales no tienen recursos para atender a los mismos médicos que están luchando contra el virus. Casi todas las instalaciones hospitalarias, carecen de agua por falta del servicio y por tanques contaminados, y electricidad, algunas se están cayendo por filtraciones y falta de mantenimiento. Equipos desmantelados, quirófanos cerrados, pisos enteros clausurados por contaminación, no hay ni cloro. La ruina del sector salud en Venezuela, es generalizada, recibir tratamientos para el cáncer, insuficiencia renal, diabetes, es casi imposible. Hipertensión, ya es una causa de muerte frecuente, aún para curar una infección no hay medicamentos. Han vuelto enfermedades erradicadas como la poliomielitis, después de 30 años, el último caso se registró en año 1989, se erradicó antes que, en el resto de América en el año 1991. Y en la zona sur del país, la malaria está fuera de control. No hay cifras epidemiológicas desde el año 2016.
El sistema de salud en Venezuela, está gravemente enfermo de comunismo/socialismo, en la versión chavomadurista. El Seguro Social no tiene medicamentos, pero las cadenas de farmacias, tampoco, conseguir medicinas para la tensión alta es tan difícil como conseguir un medicamento para la epilepsia y si se consigue, los precios son tan altos que no pueden ser pagados por el 95% de la población. Esta terrible situación se agravó más con la llegada del COVID-19. El gobierno miente con la cifras de contagios y fallecimientos, no hay suficientes kits y el resultado de la prueba, tarda tanto que cuando llegan, los pacientes ya fallecieron. El único resultado que garantiza el sistema de "salud", del régimen de Nicolás Maduro Moros, es la muerte, muchas veces, lenta y dolorosa. Y si toda esto fuera poco, hay otro gran problema: la inseguridad criminal. Siendo Venezuela el país de América con el más alto índice de homicidios, los fines de semana los delincuentes heridos de bala ingresan en alta cantidad a los centros de emergencias y muchas veces, los médicos de guardia hacen su trabajo con un arma en la sien, en manos de otro miembro de la banda. Otras veces, se arman tiroteos de la banda rival que entran al recinto de emergencia, a rematar al herido, pacientes, médicos, enfermeras y demás personal del hospital, quedan en el centro del conflicto, algunas veces con trágicas consecuencias.
El sistema de salud en Venezuela, está gravemente enfermo de comunismo/socialismo, en la versión chavomadurista. El Seguro Social no tiene medicamentos, pero las cadenas de farmacias, tampoco, conseguir medicinas para la tensión alta es tan difícil como conseguir un medicamento para la epilepsia y si se consigue, los precios son tan altos que no pueden ser pagados por el 95% de la población. Esta terrible situación se agravó más con la llegada del COVID-19. El gobierno miente con la cifras de contagios y fallecimientos, no hay suficientes kits y el resultado de la prueba, tarda tanto que cuando llegan, los pacientes ya fallecieron. El único resultado que garantiza el sistema de "salud", del régimen de Nicolás Maduro Moros, es la muerte, muchas veces, lenta y dolorosa. Y si toda esto fuera poco, hay otro gran problema: la inseguridad criminal. Siendo Venezuela el país de América con el más alto índice de homicidios, los fines de semana los delincuentes heridos de bala ingresan en alta cantidad a los centros de emergencias y muchas veces, los médicos de guardia hacen su trabajo con un arma en la sien, en manos de otro miembro de la banda. Otras veces, se arman tiroteos de la banda rival que entran al recinto de emergencia, a rematar al herido, pacientes, médicos, enfermeras y demás personal del hospital, quedan en el centro del conflicto, algunas veces con trágicas consecuencias.
Personal médico, enfermeras y otros servidores de la salud
Los salarios de los médicos en Venezuela que trabajan en el sistema público de salud, son inferiores a 10 dólares mensuales. Médicos graduados, con posgrados y no menos de 10 años de práctica profesional. Igual ocurre con las enfermeras, sus salarios están por debajo de 5 dólares al mes, así como el resto del personal de salud que en muchos casos no llegan a 3 dólares al mes. Trabajan en hospitales y centros ambulatorios destruidos, sin aire acondicionado, ascensores dañados, baños inundados, cocinas cerradas y un largo etcétera de carencias. Edificaciones que no poseen las mínimas condiciones de higiene y la asepsia necesaria, lo que constituye un alto riesgo para todo el personal sanitario. Carecen de medicamentos básicos, sin insumos como guantes, jeringas, algodón, alcohol, gasa, lencería, jabón para lavarse las manos. Sin equipos, sin camillas. Por ello, desde el año 2010, el país se enfrenta a un éxodo masivo de médicos y enfermeras a países de América del Sur, principalmente, solo en Argentina trabajan más de 1.000 médicos venezolanos en hospitales públicos y privados. También Chile ha sido receptor de una gran cantidad de nuestros médicos y enfermeras. Este éxodo no solo le está costando cantidad y calidad de atención a los venezolanos, también, una gran cantidad de dinero porque en Venezuela, la carrera de medicina se imparte en universidades públicas, pagada por todos los venezolanos con el presupuesto nacional de educación. A todo esto, se suma un maltrato del gobierno al gremio médico que empezó desde el inicio del primer gobierno de Hugo Chávez Frías, quien satanizó al personal médico de manera pública en su programa de televisión en muchas oportunidades. Este maltrato no ha hecho más que empeorar en el “gobierno” de Nicolás Maduro Moros.
Los salarios de los médicos en Venezuela que trabajan en el sistema público de salud, son inferiores a 10 dólares mensuales. Médicos graduados, con posgrados y no menos de 10 años de práctica profesional. Igual ocurre con las enfermeras, sus salarios están por debajo de 5 dólares al mes, así como el resto del personal de salud que en muchos casos no llegan a 3 dólares al mes. Trabajan en hospitales y centros ambulatorios destruidos, sin aire acondicionado, ascensores dañados, baños inundados, cocinas cerradas y un largo etcétera de carencias. Edificaciones que no poseen las mínimas condiciones de higiene y la asepsia necesaria, lo que constituye un alto riesgo para todo el personal sanitario. Carecen de medicamentos básicos, sin insumos como guantes, jeringas, algodón, alcohol, gasa, lencería, jabón para lavarse las manos. Sin equipos, sin camillas. Por ello, desde el año 2010, el país se enfrenta a un éxodo masivo de médicos y enfermeras a países de América del Sur, principalmente, solo en Argentina trabajan más de 1.000 médicos venezolanos en hospitales públicos y privados. También Chile ha sido receptor de una gran cantidad de nuestros médicos y enfermeras. Este éxodo no solo le está costando cantidad y calidad de atención a los venezolanos, también, una gran cantidad de dinero porque en Venezuela, la carrera de medicina se imparte en universidades públicas, pagada por todos los venezolanos con el presupuesto nacional de educación. A todo esto, se suma un maltrato del gobierno al gremio médico que empezó desde el inicio del primer gobierno de Hugo Chávez Frías, quien satanizó al personal médico de manera pública en su programa de televisión en muchas oportunidades. Este maltrato no ha hecho más que empeorar en el “gobierno” de Nicolás Maduro Moros.
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Hospitales y centros ambulatorios
Las instalaciones de salud en Venezuela se encuentran en casi total destrucción, las que ya existían antes de llegar el chavomadurismo al gobierno y las pocas que pusieron en funcionamiento durante el mandato de Hugo Chávez. Cabe destacar que la mayoría de los hospitales anunciados, presupuestados y pagados, no fueron terminados, algunos, ni siquiera se inició su construcción. Hay un cementerio de obras a medio construir y otras donde se puso la primera piedra y se pagaron los anticipos, pero no se iniciaron las obras, así están ahora. La inmensa corrupción hizo pasto del sistema de salud en Venezuela, hay un nombre que es sinónimo de corrupción: María Eugenia Sader, fue la ministra de salud que recibió más recursos en el gobierno de Chávez y también la más corrupta. Junto a su hijo Eugen Enrique Bejarano Sader, la fiscalia les abrió una causa por "peculado doloso, asociación para delinquir y sobregiro presupuestario", hoy se desconoce el paradero de la Dra. Sader y su hijo. Ellos dos, Hugo Chávez y Nicolás Maduro, son los responsables principales de la catástrofe de salud en Venezuela.
El programa de salud “Barrio adentro”, I, II, III y IV, creado por Hugo Chávez conjuntamente con Cuba -bajo la dirección de Cuba- y en paralelo al sistema de salud que ya existía en Venezuela, funciona con serias limitaciones. Muchos de los módulos de atención primaria –fase I– en los barrios, están abandonados. Se sabe poco de la fase II, en la que se anunció la construcción de consultorios más grandes y mejor equipados, no sabemos cuántos se construyeron o ampliaron. En el año 2017, habían 13.496 consultorios I y II, hoy más del 90% de estos consultorios, no está en funcionamiento y los que funcionan se debe a que las comunidades los asumieron y los mantiene. De la fase III, se ofreció construir 600 centros de diagnóstico integrales y 600 salas de rehabilitación. Y de la fase IV, correspondiente a la construcción de centros especializados, se sabe de la construcción y puesta en funcionamiento del Hospital Cardiológico Infantil de Caracas. En el año 2010 aparecen 576 obras sin concluir, iniciadas entre el 2007 y 2009, solo se terminaron 148 de esta cuenta, los números de los años siguientes son muy parecidos, muchas obras planificadas y presupuestadas, pocas terminadas.
Algunas obras hospitalarias que hoy permanecen sin terminar:
Hospital Cardiológico y Oncológico de Adultos, Montalban, Caracas
Hospital Oncologico de Guareans, Estado Miranda
Centro Nacional del Cáncer
Hospital General y Materno Infantil de Apure, Estado Apure
Hospital General, Toxicológico y Oncológico de Barinas, Estado Barinas (estado natal de Hugo Chávez)
Hospital General y de Nefrología de Guárico, Estado Guárico
Hospital General, de Gastroenterología y Oncología de El Vigía, Estado Mérida
Hospital de San Félix, Estado Bolívar
Hospital de Las Tejerías. Estado Aragua
Hospital General del IVSS. Estado Trujillo
Hospital de Guanta. Estado Anzoáteguí
Hospital de Dabajuro. Estado Falcón
Hospital General de Urología de Valle de la Pascua. Estado Guárico
Hospital tipo III del IVSS de San Felipe. Estado Yaracuy
Hospital Materno Infantil de Araure. Estado Portuguesa
Unidad de Diálisis del Hospital Rafael Rangel, Bococó, Estado Trujillo
Maternidad en Los Nevados, Tinaquillo, Estado Cojedes
Después de gastar 76 mil millones de dólares en 13 años, en Venezuela, el sistema de salud está destruido, según la Encuesta Nacional de Hospitales 2018, hay "88% de escasez de medicamento, 79% de material quirúrgico, 76% de los hospitales no cuentan con servicio de agua y en 53% los quirófanos están cerrados". Las cifras de mortalidad infantil y materna han aumentado, así como de malaria, difteria y sarampión. Por supuesto que los programas de vacunación son inexistentes. El dengue y otros padecimientos febriles, hacen estragos en la población.
En realidad el programa “Barrio adentro”, le sirvió al gobierno de Chávez para llenar a Venezuela de agentes cubanos, entre algunos “médicos”, –entre comillas, porque nunca revalidaron sus títulos, no sabemos si son médicos– y sacar miles de millones de dólares, en “cuentas por pagar” a Cuba, pagados en dinero efectivo y petróleo, por “servicios de salud”.
La realidad de los hospitales y centros de salud en Venezuela es esta, después de que el país recibió, más de un millón de millones de dólares, en 14 años, –periodo en el que gobernó Chávez– solo por concepto de ingresos por la exportación de petróleo, la cifra más alta recibida en toda la historia de Venezuela, por un solo gobierno y por todos los gobiernos anteriores, juntos, desde la independencia…
En los hospitales:
No hay agua y los tanques para almacenarla, están contaminados
No hay electricidad
No hay ascensores, en algunos solo funciona el de servicio, por donde bajan basura y desechos biológicos, suben las personas enfermas
No hay baños funcionales, cuando se inundan y expulsan materia fecal, son cerrados como única medida posible
No hay cocinas funcionales, tampoco alimentos
No aire acondicionado ni en los quirófanos, muchos están cerrados
No hay camas suficientes ni lencería ni otro tipo de mobiliario
No hay la protección mínima para evitar el contagio del COVID-19
Los techos se caen… Esta es la realidad de la salud en Venezuela, una catástrofe humanitaria.
Las instalaciones de salud en Venezuela se encuentran en casi total destrucción, las que ya existían antes de llegar el chavomadurismo al gobierno y las pocas que pusieron en funcionamiento durante el mandato de Hugo Chávez. Cabe destacar que la mayoría de los hospitales anunciados, presupuestados y pagados, no fueron terminados, algunos, ni siquiera se inició su construcción. Hay un cementerio de obras a medio construir y otras donde se puso la primera piedra y se pagaron los anticipos, pero no se iniciaron las obras, así están ahora. La inmensa corrupción hizo pasto del sistema de salud en Venezuela, hay un nombre que es sinónimo de corrupción: María Eugenia Sader, fue la ministra de salud que recibió más recursos en el gobierno de Chávez y también la más corrupta. Junto a su hijo Eugen Enrique Bejarano Sader, la fiscalia les abrió una causa por "peculado doloso, asociación para delinquir y sobregiro presupuestario", hoy se desconoce el paradero de la Dra. Sader y su hijo. Ellos dos, Hugo Chávez y Nicolás Maduro, son los responsables principales de la catástrofe de salud en Venezuela.
El programa de salud “Barrio adentro”, I, II, III y IV, creado por Hugo Chávez conjuntamente con Cuba -bajo la dirección de Cuba- y en paralelo al sistema de salud que ya existía en Venezuela, funciona con serias limitaciones. Muchos de los módulos de atención primaria –fase I– en los barrios, están abandonados. Se sabe poco de la fase II, en la que se anunció la construcción de consultorios más grandes y mejor equipados, no sabemos cuántos se construyeron o ampliaron. En el año 2017, habían 13.496 consultorios I y II, hoy más del 90% de estos consultorios, no está en funcionamiento y los que funcionan se debe a que las comunidades los asumieron y los mantiene. De la fase III, se ofreció construir 600 centros de diagnóstico integrales y 600 salas de rehabilitación. Y de la fase IV, correspondiente a la construcción de centros especializados, se sabe de la construcción y puesta en funcionamiento del Hospital Cardiológico Infantil de Caracas. En el año 2010 aparecen 576 obras sin concluir, iniciadas entre el 2007 y 2009, solo se terminaron 148 de esta cuenta, los números de los años siguientes son muy parecidos, muchas obras planificadas y presupuestadas, pocas terminadas.
Algunas obras hospitalarias que hoy permanecen sin terminar:
Hospital Cardiológico y Oncológico de Adultos, Montalban, Caracas
Hospital Oncologico de Guareans, Estado Miranda
Centro Nacional del Cáncer
Hospital General y Materno Infantil de Apure, Estado Apure
Hospital General, Toxicológico y Oncológico de Barinas, Estado Barinas (estado natal de Hugo Chávez)
Hospital General y de Nefrología de Guárico, Estado Guárico
Hospital General, de Gastroenterología y Oncología de El Vigía, Estado Mérida
Hospital de San Félix, Estado Bolívar
Hospital de Las Tejerías. Estado Aragua
Hospital General del IVSS. Estado Trujillo
Hospital de Guanta. Estado Anzoáteguí
Hospital de Dabajuro. Estado Falcón
Hospital General de Urología de Valle de la Pascua. Estado Guárico
Hospital tipo III del IVSS de San Felipe. Estado Yaracuy
Hospital Materno Infantil de Araure. Estado Portuguesa
Unidad de Diálisis del Hospital Rafael Rangel, Bococó, Estado Trujillo
Maternidad en Los Nevados, Tinaquillo, Estado Cojedes
Después de gastar 76 mil millones de dólares en 13 años, en Venezuela, el sistema de salud está destruido, según la Encuesta Nacional de Hospitales 2018, hay "88% de escasez de medicamento, 79% de material quirúrgico, 76% de los hospitales no cuentan con servicio de agua y en 53% los quirófanos están cerrados". Las cifras de mortalidad infantil y materna han aumentado, así como de malaria, difteria y sarampión. Por supuesto que los programas de vacunación son inexistentes. El dengue y otros padecimientos febriles, hacen estragos en la población.
En realidad el programa “Barrio adentro”, le sirvió al gobierno de Chávez para llenar a Venezuela de agentes cubanos, entre algunos “médicos”, –entre comillas, porque nunca revalidaron sus títulos, no sabemos si son médicos– y sacar miles de millones de dólares, en “cuentas por pagar” a Cuba, pagados en dinero efectivo y petróleo, por “servicios de salud”.
La realidad de los hospitales y centros de salud en Venezuela es esta, después de que el país recibió, más de un millón de millones de dólares, en 14 años, –periodo en el que gobernó Chávez– solo por concepto de ingresos por la exportación de petróleo, la cifra más alta recibida en toda la historia de Venezuela, por un solo gobierno y por todos los gobiernos anteriores, juntos, desde la independencia…
En los hospitales:
No hay agua y los tanques para almacenarla, están contaminados
No hay electricidad
No hay ascensores, en algunos solo funciona el de servicio, por donde bajan basura y desechos biológicos, suben las personas enfermas
No hay baños funcionales, cuando se inundan y expulsan materia fecal, son cerrados como única medida posible
No hay cocinas funcionales, tampoco alimentos
No aire acondicionado ni en los quirófanos, muchos están cerrados
No hay camas suficientes ni lencería ni otro tipo de mobiliario
No hay la protección mínima para evitar el contagio del COVID-19
Los techos se caen… Esta es la realidad de la salud en Venezuela, una catástrofe humanitaria.
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Medicinas e insumos hospitalarios
La situación del abastecimiento de medicinas es igual, ¡NO HAY NADA! Todo los medicamentos e insumos requeridos por un paciente para ser hospitalizado y tratado, debe ser comprado por sus familiares. Si se trata de operaciones quirúrgicas de emergencia o electivas, todo tienen que comprar, porque de lo contrario no se puede realizar el acto médico, en los pocos hospitales donde funcionan los quirófanos. Existe lo que llaman el “kit quirúrgico” que muchas veces es vendido por personal del mismo hospital, convirtiendo los medicamentos e insumos en un tráfico inhumano, que es fomentado por una administración pública, profundamente corrupta.
La situación del abastecimiento de medicinas es igual, ¡NO HAY NADA! Todo los medicamentos e insumos requeridos por un paciente para ser hospitalizado y tratado, debe ser comprado por sus familiares. Si se trata de operaciones quirúrgicas de emergencia o electivas, todo tienen que comprar, porque de lo contrario no se puede realizar el acto médico, en los pocos hospitales donde funcionan los quirófanos. Existe lo que llaman el “kit quirúrgico” que muchas veces es vendido por personal del mismo hospital, convirtiendo los medicamentos e insumos en un tráfico inhumano, que es fomentado por una administración pública, profundamente corrupta.
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COVID-19
El COVID-19, ha empeorado exponencialmente la situación del sistema de salud en Venezuela, siendo el personal sanitario, las víctimas más expuesta al contagio. A la fecha, Venezuela suma la mayor cantidad de médicos, enfermares, camilleros y asistentes, en el mundo, fallecidos por el contagio del virus, porque no tienen la bioprotección necesaria para realizar su trabajo. Las cifras de pruebas, contagios y fallecimientos por COVID-19, es un fraude gubernamental, el virus está haciendo estragos en una población ya muy vulnerable a todo tipo de enfermedades, por la baja ingesta de nutrientes, crónica. En realidad, la pandemia le ha servido al “gobierno” de Nicolás Maduro para agudizar la represión a la ciudadanía y al personal médico, quienes han sido víctimas de la criminalización que ha hecho el gobierno de médicos, por reclamar la dotación necesaria para enfrentar el COVID-19. En cuanto a los ciudadanos, el propio Nicolás Maduro, ha etiquetado a los venezolanos emigrantes, que están regresando a Venezuela, por la crisis creada por el virus en todo el mundo, como "trocheros" y "bioterroristas", ordenando detención y prisión para ellos. También ha servido, para ocultar las cifras de fallecimientos por otras patologías como cáncer, enfermedad renal, hipertensión, diabetes, corazón y una larga lista porque cualquier padecimiento de salud en Venezuela, conlleva el riesgo inminente de muerte, por sencillo y curable que sea.
El COVID-19, ha empeorado exponencialmente la situación del sistema de salud en Venezuela, siendo el personal sanitario, las víctimas más expuesta al contagio. A la fecha, Venezuela suma la mayor cantidad de médicos, enfermares, camilleros y asistentes, en el mundo, fallecidos por el contagio del virus, porque no tienen la bioprotección necesaria para realizar su trabajo. Las cifras de pruebas, contagios y fallecimientos por COVID-19, es un fraude gubernamental, el virus está haciendo estragos en una población ya muy vulnerable a todo tipo de enfermedades, por la baja ingesta de nutrientes, crónica. En realidad, la pandemia le ha servido al “gobierno” de Nicolás Maduro para agudizar la represión a la ciudadanía y al personal médico, quienes han sido víctimas de la criminalización que ha hecho el gobierno de médicos, por reclamar la dotación necesaria para enfrentar el COVID-19. En cuanto a los ciudadanos, el propio Nicolás Maduro, ha etiquetado a los venezolanos emigrantes, que están regresando a Venezuela, por la crisis creada por el virus en todo el mundo, como "trocheros" y "bioterroristas", ordenando detención y prisión para ellos. También ha servido, para ocultar las cifras de fallecimientos por otras patologías como cáncer, enfermedad renal, hipertensión, diabetes, corazón y una larga lista porque cualquier padecimiento de salud en Venezuela, conlleva el riesgo inminente de muerte, por sencillo y curable que sea.
Coronavirus en Venezuela
¿Cuál es la verdadera capacidad hospitalaria de Venezuela? |
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Inseguridad en los centros de salud
La inseguridad es otro gran problema en los hospitales de todo el país, la ausencia de vigilancia policial, deja a los centros de salud desprotegidos, en el país con la más alta tasa de homicidios en América del Sur. Los fines de semana aumentan los crímenes y el trabajo en los hospitales, muchas veces los delincuentes se atacan entre sí y los heridos son llevados a los centros de salud, por sus compañeros armados, el personal sanitario debe atenderlos bajo la “vigilancia” y amenaza de muerte, de los delincuentes. Es otro de los graves problemas sin atención, que el gobierno de Maduro, "tapa" con el COVID-19.
El sistema de salud en Venezuela, bien podría ser la descripción de uno de los infiernos de Dante, pero creado por el comunismo/socialismo, bajo la dirección de Hugo Chávez y Nicolás Maduro y sus “gobiernos”.
La inseguridad es otro gran problema en los hospitales de todo el país, la ausencia de vigilancia policial, deja a los centros de salud desprotegidos, en el país con la más alta tasa de homicidios en América del Sur. Los fines de semana aumentan los crímenes y el trabajo en los hospitales, muchas veces los delincuentes se atacan entre sí y los heridos son llevados a los centros de salud, por sus compañeros armados, el personal sanitario debe atenderlos bajo la “vigilancia” y amenaza de muerte, de los delincuentes. Es otro de los graves problemas sin atención, que el gobierno de Maduro, "tapa" con el COVID-19.
El sistema de salud en Venezuela, bien podría ser la descripción de uno de los infiernos de Dante, pero creado por el comunismo/socialismo, bajo la dirección de Hugo Chávez y Nicolás Maduro y sus “gobiernos”.
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Pro Libertad de Venezuela PROLIVEN
Soy Ciudadana, mi partido: Venezuela
Mi causa, su Libertad
Al lado de quien lo haga bien, en contra de quien lo haga mal
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Creado por: Eruby Villamarín Páez
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